Desde que Bartolomé Díaz lo avistara hacia 1488, el Cabo de Buena Esperanza abría la conexión desde Europa con el Océano Índico y las rutas por mar hacia Oriente y las Islas de las Especias, especie de bisagra de una puerta que unía dos mundos. En sentido inverso, la llegada de la nao Victoria en abril de 1522 a este accidente geográfico, marcaba de alguna manera el inicio del regreso a casa, al ser una ruta ya conocida especialmente por los marinos portugueses.
Nueve semanas dice Pigafetta que permanecieron enfrente de este cabo, "el más grande y peligroso cabo conocido de la Tierra", y no sería hasta el 19 de mayo cuando doblaron finalmente los expedicionarios esta punta donde hoy se sitúa la sudafricana Ciudad del Cabo.
Verdadero espacio de transición y conexión a nivel planetario, en este área de Sudáfrica se localiza el Reino Florístico del Cabo, considerado un punto crítico de la biodiversidad mundial por la gran cantidad de especies singulares que alberga. Créditos - Ilustración: Jacob van Meurs, 1682
Nueve semanas dice Pigafetta que permanecieron enfrente de este cabo, "el más grande y peligroso cabo conocido de la Tierra", y no sería hasta el 19 de mayo cuando doblaron finalmente los expedicionarios esta punta donde hoy se sitúa la sudafricana Ciudad del Cabo.
Verdadero espacio de transición y conexión a nivel planetario, en este área de Sudáfrica se localiza el Reino Florístico del Cabo, considerado un punto crítico de la biodiversidad mundial por la gran cantidad de especies singulares que alberga. Créditos - Ilustración: Jacob van Meurs, 1682
Espacios
Especies
Especímenes
CO2 absorbido (Kg/año)
0
Administradores